El vicepresidente de la Comisión Europea, Jyrki Katainen, y los distribuidores minoristas, entre otros grupos interesados, ​​se han reunido en el evento anual Retail Forum for Sustainability para hablar sobre cómo la distribución puede contribuir a abordar el desafío de reducir los residuos de plástico. El mismo está recogido en las medidas del Paquete sobre Economía Circular de la UE, por lo que la Comisión Europea está elaborando una «Estrategia sobre Plásticos».

«Para que la Estrategia de Plásticos de la UE sea exitosa y se implemente dentro de la Economía Circular es importante que todos los actores a lo largo de la cadena de valor asuman su responsabilidad y hagan su contribución para abordar cuestiones clave relacionadas con los plásticos. Ningún actor puede lograr un impacto a escala, pero los minoristas que participaron en el Retail Forum están dispuestos a demostrar su compromiso«, dijo Susanne Checa, Directora General de ERRT (European Retailer Round Table). Algunas de las claves son la minimización de los residuos plásticos en las cadenas de suministro, la promoción del reciclaje, el aumento del uso de materiales reciclados y renovables.

Sobre la mesa se puso otro desafío clave para una exitosa transición hacia la Economía Circular: involucrar a los consumidores. En este sentido, la distribución minorista tiene un papel clave a la hora de compartir los beneficios de la Economía Circular, ya que millones de consumidores europeos compran sus productos en las tiendas todos los días y están cada vez más interesados ​​en el impacto ambiental de los productos.

Los consumidores europeos tienen la oportunidad de liderar la transformación a través de sus opciones y los minoristas ya están informando y comprometiendo a los consumidores, por ejemplo, ofreciéndoles productos con envases con menor impacto ambiental, proporcionándoles consejos sobre cómo almacenar alimentos y cocinar con las sobras para reducir los desperdicios de alimentos, etc. A modo de ejemplo, podemos mencionar que los supermercados de ASEDAS han reducido el uso de bolsas de plástico entre un 80 y un 90% desde 2010.